ViureK es un modelo innovador que busca rehabitar los espacios urbanos vacíos del Cabanyal con vivienda accesible y colaborativa.
Este planteamiento, además de ampliar el parque de vivienda de protección pública, busca dar con un modelo que se integre en el tejido social del barrio, adaptándose a las dinámicas territoriales del Cabanyal.
PUNTOS CLAVE
01) Cooperativa de viviendas
Los socios y socias de la cooperativa son los propios residentes y son quienes promueven y gestionan su propia vivienda de manera colectiva.
02) Vivienda colaborativa dispersa mediante derecho de superficie
La administración cede a la cooperativa diferentes solares mediante derecho de superficie. Estos edificios dispersos forman conforman el proyecto de vivienda colaborativa, fortaleciendo una red de convivencia y colaboración sólida a nivel urbano.
03) Autogestión, corresponsabilidad y democracia
Las decisiones se toman democráticamente, implicando a todas las socias y socios residentes en la gestión y organización de la cooperativa.
04) Propiedad colectiva y cesión de uso
La cooperativa es propietaria de las viviendas y sus socios y socias disfrutan de su uso a largo plazo mediante un contrato de cesión. Las socias aportan una cuota de acceso y, posteriormente cuotas mensuales para hacer frente a los gastos de construcción.
05) Gestión colectiva de la energía
La cooperativa gestiona los suministros energéticos y apoya la transición ecosocial del barrio mediante una comunidad energética. Desarrolla acciones como el uso de energías renovables, la eficiencia energética, el reparto justo de la energía y la sensibilización sobre la crisis climática
06) Colaboración público-cooperativa
Es fundamental, ya que la administración debe estar abierta a promover estos proyectos. Aunque delega la promoción y gestión en la cooperativa, establece las condiciones del contrato de cesión del suelo público. Gracias a esta colaboración, los precios de la vivienda son más bajos y se puede aumentar el parque de vivienda social.
¿Por qué en
el Cabanyal?
El vecindario del Cabanyal lleva décadas conviviendo con los vacíos urbanos que dejó a su paso el plan fallido de prolongación de Blasco Ibáñez y el consiguiente proceso de degradación al cual fue sometida la zona.
A este complejo contexto se le suman las dinámicas de mercantilización y gentrificación que han hecho aumentar los precios de la vivienda a límites históricos. Además, el parque de vivienda pública es muy escaso, lo que provoca que la asequibilidad de la vivienda para las vecinas sea muy limitada.
En ViureK se propone llenar estos vacíos urbanos con vivienda de protección pública mediante una cooperativa de viviendas en cesión de uso dispersa. Estudiamos los horizontes de este modelo para adaptarlo a la realidad del Cabanyal.
Para difundir el modelo y crear un espacio de diálogo, se organizó una jornada en el Centro Cultural El Escorxador del Cabanyal sobre la situación del acceso a la vivienda en el barrio del Cabanyal y las cooperativas de vivienda en cesión de uso como alternativa residencial.
ECLEKTE presentó el proyecto de investigación ViureK. Además, se contó con la participación de entidades especialistas en cooperativismo de vivienda como FECOVI y IUDESCOOP; se presentaron experiencias previas en nuestro territorio de la mano de Domèstiques y Corriol, y desde Lacol se reflexionó sobre infraestructuras comunitarias para la sostenibilidad de la vida.
La jornada estuvo dividida en dos sesiones. La primera enfocada hacia personal técnico y administraciones, donde se abordaron los puntos clave de la colaboración público-cooperativa en la consecución de estos proyectos. La segunda sesión, dirigida hacia la ciudadanía, tenía el objetivo de visibilizar el modelo de cooperativa de vivienda en cesión de uso como alternativa habitacional y conocer experiencias previas.
